La rosácea es una afección de la piel muy común, pero muy pocas personas que la tienen, saben que la padecen. Los primeros síntomas de esta dolencia aparecen en la piel en forma de rubor ante un piropo o situación que ocasiona vergüenza. Ese rubor, conocido como “flusing” o enrojecimiento que, aparece de forma súbita y desaparece del igual manera, debiera ser tomado en cuenta como una advertencia.
Lo que en principio puede ser tomado como un enrojecimiento pasajero, con el paso del tiempo puede fijarse en la piel de manera permanente. En este caso ya estaríamos hablando de Rosácea en el grado leve de esta dolencia. Lo preocupante de esto, es que hay más grados, llegando incluso, en los peores casos, a ocasionar nódulos, pápulas o pústulas repartidas por la zona central del rostro.
Mis consejos hoy, son para ayudar a estas personas que sufren esa enfermedad crónica e inflamatoria pero benigna para que su rostro este mas blanco y no sufran los síntomas con mucha intensidad.
Las cosas que empeoran la rosácea
El origen de la Rosácea es variado y multifactorial, se dice que hay un componente genético, psicológico, intestinal… En resumen, no se conoce con exactitud la causa, pero si se conoce qué cosas lo agravan. Y entre ellas cabe destacar:
- El estrés, por ello, te aconsejo que si sufres o crees que puedes sufrir rosácea, te tomes un tiempo para ti, aprendas técnicas de relajación y de respiración, ya que una buena respiración profunda libera muchas toxinas de la piel y del organismo.
- El consumo de alcohol. La rosácea tiene un componente de dilatación y pérdida de elasticidad de los vasos sanguíneos de pequeño calibre y esto es algo que el alcohol agrava.
- El consumo de bebidas calientes.
- El acceso a spas, saunas y baños turcos, así como, las duchas con agua muy caliente.
- La cosmética inadecuada. Es imprescindible que tengas mucho cuidado con la cosmética que usas. Las pieles con rosácea son pieles muy reactivas y sensibles y además se deshidratan con más facilidad.
Un problema incómodo
Lo que en principio es un rubor, con el tiempo puede convertirse en un problema y no solo estético, la rosácea es un problema muy incómodo.
En estadio leve, produce enrojecimiento y dilatación de pequeños vasos de la nariz y las mejillas, en muchas ocasiones este enrojecimiento se asocia con ardor, picor, escozor y sensación de piel seca.
En su forma moderada o intermedia, puede producir puntos rojos palpables (pápulas), que en ocasiones están llenos de pus (pústulas).
Finalmente, aunque los casos son poco frecuentes en su forma más severa, la rosácea puede producir fibrosis en la piel, llegando a producir deformaciones, principalmente en la nariz o en los párpados.
Ataja tu rosácea desde el principio
Si ya tienes pápulas o pústulas, es importante que acudas al dermatólogo para que las revise y te recete la medicación necesaria para que remitan y no vaya a más. Si todo va bien, habrán remitido después de 15 o 20 días y es cuando tendrás que empezar a cuidar tu piel de forma adecuada para que no se repitan.
A continuación te daré unos consejos para minimizar los efectos de la rosácea, pero mi primer consejo, sin duda, es que te pongas en nuestras manos expertas. Haré un estudio de la piel de tu rostro y te daré las recomendaciones cosméticas adecuadas para ti.
Si te encuentras en Madrid, ven a verme, y te realizaré un completo estudio de la piel, tomando mediciones precisas de los parámetros de tu piel. Estas mediciones me permitirán hacerte la recomendación cosmética adecuada para ti y te citaremos para una revisión donde podremos medir como ha evolucionado tu piel (más información).
Si vives lejos de Madrid y no tienes pensado visitarlo, o simplemente no te gustan los centros de belleza, :P puedes hacer tu estudio de la piel online (más información).
Si tienes rosácea estos son los consejos que no deberías olvidar
- Incorpora, a tu rutina de cuidado, antioxidantes y productos vitaminados para aumentar tus defensas cutáneas.
- No uses jabones y si puedes evitar el agua mejor.
- Hidrata la piel adecuadamente con cremas con activos hidratantes de bajo peso molecular. Estas cremas son profesionales y no suelen venderse en farmacias.
- En primavera el problema suele agravarse por el aumento de las temperaturas, el viento y el sol, por lo que recomiendo el uso obligatorio de protectores solares de 50 +. También debes usar gorros y fulares para que el viento no te dé directamente en la cara.
- Aumenta la ingesta de verduras y frutas que contengan betacarotenos.
Desde el momento en el que sientas que tu piel se ruboriza, notas calor en la cara toma medidas, ya que es mejor actuar a tiempo, pero no desesperes porque con unos buenos hábitos y una cosmética adecuada puedes mantener a raya esta dolencia silenciosa evitando que la rojez se asiente en tu piel de manera definitiva.